Jeremy Hammond, hacker del desaparecido grupo LulzSec, fue puesto en la lista de posibles terroristas por el FBI, de acuerdo a un documento confidencial obtenido por el diario digital The Daily Dot, el cual data de marzo de 2012. En dichos papeles se informa que Hammond, quien hoy se encuentra cumpliendo una condena de 10 años desde la fecha de emisión del informe, ha sido acusado por cargos de fraude computacional en reiteradas ocasiones, lo cual, según el organismo norteamericano, es razón suficiente como para catalogarlo como un peligro para la sociedad.
Ante dicho calificativo, las organizaciones de defensa civil saltaron a la defensa de Hammond, acusando al FBI de distorsionar el concepto para sus propios intereses. "Esto nos hace dudar de la definición de terrorismo que tiene el gobierno de los Estados Unidos, teniendo en cuenta que lo han expandido a los hackers", dijo a The Guardian Hanni Fakhoury, abogado de la fundación Electronic Frontier.
En el documento aparecen afirmaciones dudosas, como que Hammond sería parte de un colectivo derechamente terrorista. El abogado dijo al respecto que "si fuera Al Qaeda o Estado Islámico no significaría ningún problema para mí, pero si se están refiriendo a Anonymous, estaría en una posición distinta".
Queda la duda de si realmente el hacktivismo puede ser considerado como un delito de características extremistas o no, ya que, si bien Hammond ha sido acusado de fraude e ingreso ilegal a computadores con fines de obtención de información, nunca se ha demostrado que dichos hechos sean con fines dañinos para la sociedad. Además, según indica The Daily Dot, el concepto de terrorismo para el gobierno norteamericano, es un acto que represente un "peligro para la vida humana", por lo que sólo nos queda preguntar si las acciones del hacker realmente significan o han causado un daño significativo en la sociedad en general.
No hay comentarios:
Publicar un comentario