Las tres leyes de la robótica de Isaac Asimov representan uno de los casos más curiosos en el matrimonio entre ficción y realidad. Iniciado en el terreno del ensayo y la literatura terminaron popularizándose para aplicarse por fin en la naciente industria de la robótica, que cada vez es más avanzada y peligrosa.
Es por ello que The British Standards Institute (BSI) ha encargado a un grupo de filósofos, apoyados por científicos, técnicos y académicos para que desarrollasen un nuevo tratado, que abordase con mayor profundidad y detalle la ética para el diseño, fabricación y uso de robots.
El documento, publicado bajo el título Robots and robotic devices. Guide to the ethical design and application of robots and robotic systems, busca convertirse en un referente moderno para el sector robótico, con un espectro más amplio en su abordaje. Así lo afirma Alan Winfield, uno de los autores del proyecto en entrevista con The Guardian:
(C) Bao LabsPor lo que yo sé este sería el primer estándar para el diseño ético de robots publicado de manera formal. Es un poco más complejo y sofisticado que las leyes de Asimov.
Presentado hace una semana en una conferencia sobre Robótica en Oxford este documento en realidad aborda con mayor profundidad los puntos planteados por Asimov y va un poco más lejos.
Ahora se incluyen temas como el desarrollo de vínculos emocionales, o la integración de nuevas variables como el comportamiento sexista o racista en autómatas.
Aún así, seguimos en un terreno con mucho camino por recorrer.
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