A estas alturas es muy extraño encontrarse con cámaras fotográficas analógicas, de esas que se tenían que ir a revelar el rollo para ver las imágenes capturadas. Pero una pequeña cámara de plástico había logrado sobrevivir todos estos años. La Holga, fabricada por Freestyle Photographic, se hizo de un nicho de mercado seguidor de la fotografía y los interesantes efectos que producía su lente de plástico.
La Holga es una cámara de formato medio que se lanzó en 1981, según informa TechCrunch, y ahora 34 años después ya no existe inventario porque su producción ha cesado. Fabricada de plástico, incluido el lente, tenía un precio muy bajo y era considerada una cámara de juguete. Con los años se convirtió en un producto de culto y precursor de lo que hoy son los filtros de Instagram.
(cc) Flickr | Photon™Así lo publicó Gerald H. Karmele, CEO de Freestyle Photographic:
"Freestyle Photographic ha anunciado que la fábrica que produce cámaras Helga ha cesado operaciones y ya no producirá estas cámaras y accesorios. Helga sobrevivió muchas otras cámaras pero, como hemos visto con los años, es otra víctima de la era digital."
Si llegan a encontrar alguna, no duden en comprarla, pues se convertirá en objeto de colección. Hasta nunca Holga.
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