Fue en enero del 2012, cuando el FBI realizó un operativo para ejecutar el cierre de Megaupload. Desde entonces, las investigaciones han avanzado a paso lento, al grado que Kim Dotcom y compañía, no se han parado en cortes gringas.
Según publica TorrentFreak, los antiguos servidores de MegaUpload, que suman más de mil, están bajo resguardo en Virgina, y contienen información importante para el caso. Sin embargo, tener tanta información almacenada cuesta varios miles de dólares, por lo que se solicitó a la corte la eliminación de dicha información para ahorrar en costos.
El equipo legal de Megaupload quiere evitar que se pierda toda esa evidencia, por lo que ha pedido que el gobierno de los Estados Unidos se haga cargo de los costos asociados a su mantenimiento. Pero las autoridades niegan toda responsabilidad en el tema. La abogada Dana Boente, justifica la postura del gobierno:
"... el gobierno ya ha completado la copia de la información de los servidores autorizados por la orden. Como tal, no hay bases para que la Corte ordene al gobierno que asuma posesión de los servidores o reembolse [a la compañía de hosting] los hosts asignados relacionados a su mantenimiento."
Es decir, el gobierno de los Estados Unidos no determinará el destino de dichos servidores, incluyendo la información que almacenen. Y si permitirán que Megaupload y los acusados puedan revisar la información que fue copiada por las autoridades, pero solo después de que hayan sido procesados, sí es que eso llega a suceder.
El futuro de dichos servidores, y su información, pende de un hilo. Si la Corte se decanta en favor de las autoridades, entonces todo será borrado en beneficio del gobierno de los Estados Unidos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario