3D Robotics, compañía especializada en la fabricación de Drones y piezas para armado casero, cofundada por quien fuera el editor en jefe de la revista Wired, Chris Anderson y el mexicano Jordi Muñoz, entre otros, hace ya un par de años, ha recibido una épica inversión de USD $50 millones (CLP $30.864 millones / MXN $750 millones) por parte de los chicos de Qualcomm, sí los mismos de los procesadores Snapdragon, poniendo las cartas listas para una nueva etapa en esta empresa.
Los drones parecen ser el futuro, y el desempeño de 3D Robotics en el mercado casi lo confirma.
La visión, la sincronía: el caso 3D Robotics
Ver en YouTube
Con más de 50 años de edad y todo el tiempo dentro del negocio, Anderson tuvo la gracia de vislumbrar las tendencias del mercado tecnológico en distintos terrenos, desde la cada vez más agónica trinchera de las publicaciones impresas. La fundación de 3D Robotics por un grupo de cinco individuos en su momento parecía un cambio radical, aventurado y poco seguro, sin embargo, a dos años de su creación ya hemos tenido la oportunidad de ser testigos de algunos impresionantes resultados dentro de este sector, con la producción de drones para uso civil.
El Iris+ actualmente es la joya de la corona en el catálogo de 3D Robotics, con un costo de USD $750,00 (CLP $462.962 / MXN $11.260), compatibilidad completa para ser controlado por cualquier dispositivo Android, integrándose con las cámaras GoPro para captura de fotografía y video el Alta Definición, es sin duda uno de los motivos más fuertes por los que Qualcomm decidió invertir esta fuerte cifra, buscando expandir la presencia de la compañía, incursionando también en los terrenos de los teléfonos inteligentes.
De acuerdo con un reporte de Robohub, los USD $50 millones de inversión de Serie C fueron provistos por Qualcomm, bajo el objetivo de comenzar una dinámica de cooperación e integración en materia de software y hardware con los productos de 3D Robotics, contemplando, en un futuro no muy lejano la producción de procesadores Snapdragon diseñados especialmente para esta línea, un terreno que va totalmente en armonía con la visión que tiene Qualcomm para su nueva generación de dispositivos, que integrará tecnología de sensores y una sustancial mejora en la capacidad de procesamiento.
El acuerdo de Qualcomm con 3D Robotics significaría la antesala para la creación de drones de nueva generación, mucho más inteligentes, con mayor capacidad de funciones, más seguros y precisos en su desempeño. El Snapdragon 820 acaba de presentarse hace poco en el propio Mobile World Congress 2015, corrigiendo algunos de los fallos de temperatura de su antecesor y prometiendo un mejor desempeño.
El potencial de los procesadores Snapdragon, comunes en smartphones y tablets de todas las gamas, integrados a una nueva camada de drones, como el núcleo que detona sus funciones, es un interesante caso de innovación, donde la aplicación práctica en los terrenos de nuestra vida diaria podría llegar a alcanzar niveles insospechados.
No hay comentarios:
Publicar un comentario