El Cosmic Microwave Background (CMB), también conocido como la radiación cósmica de microondas o radiación del fondo cósmico, es uno de los elementos fundamentales que constatan la formación del universo y el Big Bang.
Ahora, el CMB también ha hecho posible que cualquiera con acceso a una impresora 3D pueda tener un modelo a escala del universo, que cabe, casi, en la palma de la mano.
Por años hemos observado las imágenes del universo generadas a través de los datos recolectados por el SEA, pero esas ilustraciones planas en realidad no mostraban la magnitud de todo.
Por ello, un grupo de investigadores del Imperial College de Londres, decidió tomar esos datos y reinterpretarlos, para poder trasladarlos a un modelo impreso en 3D, donde fuese posible observar las variaciones de volumen y temperatura, para cada región del universo, logrando con ello la "maqueta" más elaborada hasta el momento.
Los resultados de su proyecto acaban de ser publicados en la más reciente edición del European Journal of Physics, además de tener el detalle de crear el video con que da inicio esta nota y poner a disposición de todos los archivos de impresión para que cualquiera pueda tener su propio modelo del universo.
El resultado tal vez no es muy estético, pero es mejor que las viejas imágenes del ESA.
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